Este estudio investigó el cultivo hidropónico del tomate Cherry utilizando tres sustratos: corteza de pino, algodón y fibra de coco. Se evaluó cómo cada uno influía en el crecimiento y desarrollo de las plantas, bajo un sistema hidropónico eficiente. Tras 41 días de observación, la corteza de pino favoreció un crecimiento más rápido, mayor número de tallos, hojas, biomasa y mejor desarrollo de raíces. La fibra de coco mostró ventajas en el desarrollo de foliolos y distancia entre nudos. Aunque la fibra de coco presentó ciertos beneficios, la corteza de pino fue superior en rendimiento general. Así, se concluye que la corteza de pino es la mejor opción para cultivar tomate Cherry en hidroponía.